El conjunto fuenlabreño remontó 15 puntos de desventaja ante el líder de la liga, el Barcelona. Sin embargo, no pudo llevarse la victoria tras una polémica última acción, donde el Instant Replay falló en el peor momento. Álex Urtasun y Satoransky, los mejores de cada equipo
El líder de la Liga Endesa, el Barcelona Lassa, visitó esta tarde el Fernando Martín para enfrentarse a uno de sus equipos fetiche, un MONTAKIT Fuenlabrada al que ha había ganado en 33 de los 35 duelos anteriores. 34 si sumamos la victoria de hoy, probablemente no de las más importantes pero sí de las más sufridas y polémicas. Y es que los árbitros y el Instant Replay tuvieron más protagonismo del deseado en un encuentro, por lo general, muy vistoso e igualado, como marca el 82-84 con el que terminó el encuentro.
Esa igualdad llegó a partir del segundo cuarto, porque el primero estuvo dominado de principio a fin por el Barça, que salió dispuesto a resolver el partido por la vía rápida. Pascual planteó de inicio un juego interior compuesto por la altura de Tomic y la fuerza de Samuels. Dicho en otras palabras, kryptonita para el Fuenlabrada. El croata y el americano (sobre todo éste último) fueron un vendaval para los interiores rivales, en especial para David Wear, que en menos de 1:30 minutos ya estaba en el banquillo con dos faltas. Los culés, con toda la razón del mundo, recurrieron una y otra vez a jugar por dentro, ya fuese con sus pívots o con sus exteriores llegando desde atrás. A riesgo de parecer previsible, el Barça comenzó a alejarse de la canasta, y el resultado fue incluso mejor. Cuatro triples en el primer cuarto certificaron el dominio azulgrana, que terminó el primer cuarto doblando a su rival en el marcador (14-28).
Cada canasta fuenlabreña venía precedida de un ejercicio de heroicidad. Si el Barça era un vendaval en ataque, no lo fue menos en defensa, mostrándose impenetrable en cada ataque en estático de los de Cuspinera. Durante el segundo cuarto la ventaja se fue hasta los 15 puntos (19-34), con cada intento fuenlabreño de reacción siendo rápidamente neutralizado. La entrada de Úriz y Urtasun dio algo de aire al Fuenlabrada. Ambos jugadores entendieron lo que necesitaba su equipo, menos elaboración y más ritmo. Y ahí el Barça empezó a sufrir. El Fuenlabrada le dio un punto extra de velocidad a su juego, lo que unido a cierta pérdida de frescura culé, propició un parcial de 8-0 que acercó a los locales a cuatro puntos (34-40). Finalmente se llegó al descanso con el Barça 7 arriba (36-43), pero aun así era demasiado premio para un MONTAKIT claramente inferior durante los primeros 20 minutos.
Tras el descanso llegaron los dos minutos más locos del partido, en los que pudimos ver un 2+1 de Tomic con posterior técnica sobre Tabu por protestar y un 3+1 de Marko Popovic. Y la diferencia entre ambos equipos en apenas 5 puntos. Instantes después subió hasta los 10 a favor del Barça. Tres minutos más tarde bajó hasta los 2 puntos con los que finalmente terminó el tercer cuarto (64-66). En resumen, un descontrol de partido. Y eso que los bases de cada equipo, Uriz y Satoransky, estaban siendo los mejores sobre la pista. El primero, moviendo con solvencia a su equipo, mientras que el segundo llevaba liderando a los suyos desde el segundo cuarto.
Josip Sobin empató el partido en la primera acción del último cuarto. Por delante quedaban 9 minutos en los que podía pasar de todo. La igualdad se mantuvo hasta mediado el último parcial, cuando un parcial de 0-8 a favor del Barça ponía el encuentro cuesta arriba para el Fuenlabrada (70-78). Sin embargo, un gran Álex Urtasun (máximo anotador fuenlabreño con 17 puntos) se encargó de mantener vivo el sueño local, permitiendo que su equipo llegara a los últimos segundos con opciones de ganar. De hecho, a falta de 25 el MONTAKIT tenía posesión para ponerse por delante. Al menos hasta que llegó la polémica. Marko Popovic asumió la responsabilidad en la jugada decisiva. El croata penetró a canasta, pero no pudo anotar. Aun así se quejó con vehemencia ante los árbitros de que un jugador culé se había colgado del aro, lo que daría por válida la canasta. Tras varios minutos de confusión con el Instant Replay, el trío arbitral no dio la razón a Popovic y Oleson (ex fuenlabreño para más inri) sentenció el partido desde el tiro libre.
De esta forma terminó un partido muy emocionante que quedó deslucido por la más que discutible actuación arbitral y, sobre todo, por el Instant Replay, que no funcionó en ninguna de las dos ocasiones que Jota Cuspinera lo solicitó, tal y como confirmó minutos después en rueda de prensa el técnico de un Fuenlabrada que, más allá de la polémica, jugó con un orgullo incuestionable.
82 - Montakit Fuenlabrada (14+22+28+18): Tabu (7), Llorca, Paunic (13), Wear (9), González -quinteto inicial-, Smits, Sobin (4), Popovic (13), Stevic (4), Urtasun (17), Scott (7) y Úriz (8)
84 - FC Barcelona Lassa (28+15+23+18): Satoransky (20), Abrines (11), Oleson (8), Samuels (17), Tomic (8) -quinteto inicial-, Ribas (3), Arroyo (2), Dorsey (5), Vezenkov (3) y Perperoglou (7).
