El MONTAKIT Fuenlabrada juega mañana en el Palau Blaugrana, una pista donde no ha ganado jamás. Mañana intentará estrenarse allí ante un Barcelona que no está teniendo su mejor año en liga. Álex Abrines será baja en el conjunto culé, mientras que Hugo López tendrá disponibles a todos sus jugadores.
Como cada temporada, el MONTAKIT Fuenlabrada tiene que afrontar un encuentro que para el club podría denominarse como un “marrón”, viendo los precedentes. La visita al Palau Blaugrana es sinónimo de derrota para el equipo fuenlabreño, jamás ha ganado allí en todas las temporadas que se han enfrentado en la Liga Endesa, y mañana (12:30, Telemadrid) no parece el mejor día para acabar con semejante estadística.
El principal motivo es la evidente diferencia que hay entre ambas plantillas. El MONTAKIT se las verá mañana con un equipo que aspira a todo en España y en Europa, que el jueves, sin ir más lejos, pasó por encima del vigente campeón de la Euroliga. Un Barcelona que cuenta con una pareja de bases de primerísimo nivel (Huertas, Satoransky), un par de interiores de los que marcan diferencias (Tomic y Doellman), y un juego exterior donde empieza a destacar una de las mayores promesas del continente, Mario Hezonja.
Al crecimiento del croata han ayudado sobremanera las numerosas lesiones que han castigado el juego exterior de los de Xavi Pascual. La última en producirse ha sido la de Álex Abrines, que será baja para el encuentro de mañana. Antes que él han pasado por la enfermería el ex fuenlabreño Brad Oleson o Juan Carlos Navarro, al que su maltrecho físico le está alejando del nivel que le convirtió en una leyenda de nuestro baloncesto.
Las lesiones han sido una de las causas por las que el Barça no está teniendo un año fácil en la Liga Endesa. Ahora mismo es tercero, a tres victorias de Real Madrid y Unicaja. Una diferencia excesiva que obliga al Barcelona a no tener ni un solo traspié si quiere recuperar el terreno perdido.
Una circunstancia que dificulta más, si cabe, el partido a un MONTAKIT Fuenlabrada que lejos del Fernando Martín sigue con solo una victoria en su casillero, la que logró allá en la jornada tres ante el actual colista, el Baloncesto Sevilla. Para más inri, sus cinco últimas salidas (Joventut, Valencia, Murcia, Real Madrid y Zaragoza) las ha perdido de forma clara, llegando a los últimos minutos sin opciones de victoria.
Malos precedentes para un equipo que ya cumplió la semana pasada con ese agónico triunfo ante el Baloncesto Sevilla. Un encuentro que le da al conjunto fuenlabreño un respiro de cara a los partidos donde el Fuenla sí se jugará la permanencia, las visitas a las canchas de Andorra y La Bruixa d´Or. El partido de mañana puede ser una gran prueba para que los de Hugo López se demuestren a sí mismos que lejos del Fernando Martín también pueden ser competitivos.
Para ello deberán poner fin a sus propias cuentas pendientes, como que los bases aporten más en ataque. Ya se vio ante Sevilla que Josh Mayo puede ser ese hombre, pero hasta que termine su adaptación, Dani Pérez y Alberto Díaz no deben limitarse a subir el balón. Los suplentes dieron señales de vida, anotando todos los jugadores por primera vez en mucho tiempo, pero su rendimiento aún debe mejorar. Además, jugadores como Dani Clark o Moussa Diagne llevan varias semanas en paradero desconocido, mientras otros como Andrés Miso parecen haber perdido la confianza del entrenador.
Al no haber bajas, todos ellos tendrán mañana la oportunidad de ser parte de un triunfo que sería inédito pero que, sobre todo, sería un gran empujón anímico y deportivo de cara a la recta final hacia la permanencia en la Liga Endesa.
