El C.F. Fuenlabrada entra en el mes decisivo de la temporada. En los cuatro partidos que quedan, decidirá si se mantiene en la Primera Federación o termina descendiendo a la cuarta categoría del fútbol español. Si frena el golpe de lo que ha sido este año o suma su segundo descenso consecutivo. Cuatro partidos para un objetivo que puede quedar muy encarrilado en el primero, por difícil que parezca poder ganarle al Celta de Vigo B.
Lograrlo dependerá de varios factores, pero el más importante es lo que haga el Fuenlabrada. Tres puntos más pueden hacer una diferencia enorme de cara a los otros tres partidos, dos de ellos en casa (Linense y Unionistas). Los otros factores son, cómo no, lo que hagan sus rivales en la clasificación.
El Sanse ya pinchó con el Algeciras, así que no adelantará a los azulones. Si Ceuta o Badajoz (o ambos) no vencen sus partidos, el Fuenla terminará la jornada fuera de peligro haga lo que haga en Vigo. Si, además, gana, podría distanciarse a cinco puntos del descenso con nueve por jugarse. Un premio muy jugoso que está al alcance azulón.
El Fuenlabrada viaja a Vigo tras conseguir una importantísima (y muy meritoria) victoria en casa ante el San Fernando, después de quedarse con uno menos a la media hora de partido. Un triunfo que rompió una racha de una victoria en seis encuentros. Su rival de esta jornada, el Celta B, no lleva un camino mejor pese a estar en la zona alta de la clasificación. Ni una victoria en cuatro partidos, motivo por el cual ha salido de la zona de playoff. Además, en ese tiempo, solo han podido marcar dos goles.
Para este partido, el Fuenla tiene la única baja, salvo sorpresa, de Diego Aguirre. Titular en el último partido, fue expulsado a la media hora tras frenar una contra rival y cumplirá sanción este domingo. El resto volverán a estar disponibles para un partido que puede dejar el futuro fuenlabreño inclinado hacia un lado u otro.