Tenía que llegar. Toda racha, buena o mala, tiene un final. La del Tarazona acabó hace cuatro jornadas, cuando empezó a puntuar. La del Fuenlabrada ha terminado en el campo de los de Molo Casas. Unos suman su cuarto partido sin perder. Otros dejan su marca en nueve. Todo tiene su final, y el de la racha fuenlabreña ha llegado este sábado...aunque estuvo cerca de impedirlo.
No fue un partido disfrutón, y eso que el terreno de juego estaba impecable, casi rogando porque le acariciaran con el balón. Pocas veces pasó eso, en los breves ratos en los que un equipo y otro hallaban la fórmula para evitar los duelos por alto y las posesiones cortas. En ese terreno, y todavía con el 0-0, el que sacaba más partido era un Fuenla que conseguía llegar con peligro y tener las ocasiones. Lo que no conseguía era meterlas, y es lo que, a la postre, le costaría el partido.
Eso y que cometió un fallo terrible atrás que prácticamente le regaló el gol al Tarazona. Un mal pase atrás, directo hacia un rival muy adelantado que solo tenía que controlar y encarar a un Belman que poco más pudo hacer. Pichín recibió un regalo y no quiso ser descortés: gol y a intentar controlar el partido.
El Fuenlabrada reaccionó bien, porque no hubo diferencia entre el rendimiento anterior al gol y el posterior. De hecho, dominó más durante muchos minutos. Pero cuando tenía el dominio, no tenía las ocasiones (y viceversa). El Tarazona se rehízo de este rato de encerrarse, y se defendió de la mejor manera posible: presionando e impidiendo salir al Fuenla. Le salió muy bien la jugada...
Pero llegaron los cambios. Carlos Martínez tiró de casi todo lo ofensivo que tenía en el banquillo para buscar el empate, y la acumulación de gente arriba terminó encerrando a un Tarazona que no quería verse ahí. No es que fuera mucho el cántaro a la fuente, pero el Fuenla estuvo a punto de marcar y llevarse un punto. El responsable de casi lograrlo fue Ilies, que tuvo un disparo cruzado dentro del área entre un mar de piernas que se iba para adentro. El responsable de evitarlo, Yoel Ramírez, que estiró bien la pierna casi sin ver la jugada para terminar despejando.
A la décima llegó la derrota, y estuvo cerca de no hacerlo. Con más acierto arriba (o suerte), los azulones se habrían llevado el partido. Sin el error grosero que regala el 1-0, probablemente también. Pero estas cosas pasan, y pueden tener mucho peso. No, el Fuenla seguirá sin entrar en el playoff de ascenso. Pero seguirá durmiendo tranquilo en mitad de la tabla. Se lo ganó...hasta hoy.
ONCE DE LA S.D. TARAZONA: Yoel Ramírez; Pedreño, Trilles, Amoah, Cocca (Fer Cano); Keita, Guille Alonso (Álex Gil), Kortazar; Cubillas, Andreu Guiu, Pichín (Javi Areso)
ONCE DEL C.F. FUENLABRADA: Belman; Sotillos, Alba, Lama, Barbosa (Durán); Ale Galindo (Diego Gómez), Buer, Carlos Benítez (Raúl Hernández); Fer Ruiz, Sergio Benito (Cristóbal), Ilies
ÁRBITRO: Aimar Velasco Arbaiza
GOLES: 1-0 Pichín, min.52