Viaje en balde: el Huesca-Fuenlabrada se suspendió por inundación. ¿Y ahora qué?

El C.F. Fuenlabrada no pudo disputar su partido de la 15ª jornada de liga que el enfrentaba a la S.D. Huesca. Después de hacer el viaje hasta Aragón, el campo llevaba días inundado debido a que no paraba de llover. El árbitro, tras examinar dos veces el estado del césped, decidió suspender el encuentro. Ahora, comienza la negociación para establecer una fecha en la que se pueda jugar.

30/11/2014 | Sergio Martínez | Fn

Tras toda una semana preparando futbolística y mentalmente un encuentro que podía ser vital para la marcha del equipo, el Fuenlabrada se quedó compuesto y sin partido. Las incesantes lluvias que azotan el noreste español llevan toda la semana descargando agua sobre Huesca, y el resultado es el que veis en la imagen: el campo de El Alcoraz inundado, con charcos en los que podría entrenar Mireia Belmonte.

Estado del terreno de juego de El Alcoraz inundado por lluvia | Fn

Vamos a explicar lo que ocurrió ayer. Cuando el equipo de FnRadio llegó a Huesca, lo hizo bajo una lluvia intermitente, unas veces fuerte y otras muy leve. Llegamos al mediodía, y la gene por la ciudad ya tenía prácticamente la certeza de que el partido no se iba a jugar porque sabían cómo estaba el campo. La mayor prueba de su seguridad en la afirmación es que ni un solo aficionado se acercó hasta el estadio. Sabían que era un viaje en balde.

Aún así, ambos equipos, el trío arbitral y la prensa cumplieron con sus obligaciones y se presetaron en El Alcoraz para valorar con sus propios ojos el estado del terreno de juego. La foto que ilustra este artículo la saqué yo en ese momento.

Con los dos equipos en el campo, aparecieron ya las dos posturas diferentes. Inicialmente, el Fuenlabrada quería jugar porque había hecho un viaje largo y un desembolso económico importante que no querían volver a realizar. El Huesca, por su parte, prefería no hacerlo por varios motivos: no acumular cansancio, no arriesgarse a tener lesiones, no dañar el campo...todo porque el miércoles jugarán contra el F.C. Barcelona en ese mismo estadio.

El Fuenlabrada, por puro sentido común, terminó coincidiendo en que no se podía jugar. Con los dos equipos pensando ya lo mismo, quedaba por saber qué decidía el árbitro. Hizo una primera evaluación, y esperó media hora para volver a salir. Lo hizo con sus asistentes, vestidos de corto, y nada había cambiado. Para colmo, las previsiones eran que siguiera lloviendo durante la tarde.

La decisión era firme: el partido se suspendía. Así lo anunció oficialmente el gerente del Huesca diez minutos antes de las cinco a los medios. Ahora, comienza otra odisea, y es la de encontrar una fecha para jugar este encuentro. Debe ser un día entre semana, y debe ser antes de la segunda semana de enero (que comienza la segunda vuelta).

Ya hay diferencias evidentes entre los dos equipos. El Fuenlabrada plantea que se juegue el miércoles 10 de diciembre, entre el partido contra el Trival y el viaje a Lezama contra el Bilbao Athletic. Es una decha que el Huesca no quiere porque le metería en un calendario infernal: jugaría este miércoles con el Barça en El Alcoraz, el día 7 contra el Conquense, el 10 contra el Fuenla, el 14 contra el Trival, el 16 la vuelta de Copa contra el Barça en el Camp Nou y el 21 contra el Tudelano. Seis partidos en dieciocho días.

Por eso, dese el conjunto oscense proponen que se juegue la primera semana de enero, que es la fecha límite. El Fuenlabrada no quiere bajo ningún concepto, porque se metería entre los viajes a Leioa y Barakaldo. Por tanto, el calendario quedaría así: 4 de enero visita a Barakaldo; probablemente el 7 visita a Huesca, y el 11 visita a Leioa. Tres viajes largos y seguidos que dejarían un saldo físico y económico negativo, y es el motivo por el que el Fuenla se niega.

¿Qué ocurrirá? Si las posiciones siguen enrocadas (y por sus propios intereses deberían mantenerse así), será la Federación la que elija una fecha, que tendrán que aceptar los clubes. Tendremos que esperar unos días para conocer quién gana. Sólo quedaría una semana posible, y es complicada: entre el día 22 y el 26 de diciembre, cuando el resto de su grupo tiene un pequeño parón por la Navidad. Pero es prácticamente imposible, ya que los días 24 y 25 caen en miércoles y jueves. La semana siguiente, ocurre lo mismo con el 31 y 1. Por tanto, sólo quedan el 10 de diciembre o el 7 de enero. Uno de los dos equipos perderá antes de empezar.

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