En el segundo día tras la horrible noche de Salvador de Bahía la selección española incidió en el discurso que inició en la jornada posterior. Que este equipo ha salido de situaciones similares, que ha demostrado merecer crédito y que, en resumen, este Mundial no se ha acabado. Ni mucho menos. Para ello comparecieron dos de los grandes nombres del grupo. Xabi Alonso y Cesc. "Confiamos en el grupo, nos hemos ganado el derecho a que confíen en nosotros, tenemos una oportunidad perfecta para darle la vuelta a esto y que todo lo que hoy se ve negro el miércoles se vea blanco", inició el discurso el centrocampista del Madrid.
Según ha publicado Eduardo J. Castelao, enviado a Curitiba del diario El Mundo, Alonso, con tono didáctico, dijo que tienen localizados los problemas que hubo frente a Holanda. "Van pasando las horas, vas analizando, y sabemos lo que tenemos que corregir. No creo que fuera algo físico, fue más el desconcierto del equipo en la segunda parte, porque el equipo intentó, tras el 1-3, remontar más con el corazón que con la cabeza y nos desorganizamos", adujo un hombre que salió del campo en el minuto 61, antes de que todo se fuera por el sumidero.
Hay vida en las paredes de la residencia de Caju. "No creo que se pueda considerar esta generación como terminada. Tenemos vida, creemos, y tenemos la oportunidad perfecta de demostrar que todavía tenemos muchas cosas que decir", insistió Alonso, que avisó: "No les hemos dado ánimos a Iker y a Xavi porque no los necesitan. El grupo es el que se irá para casa si no ganamos a Chile o el que seguirá peleando si lo hacemos".
El centrocampista espera un "inicio fuerte" de Chile en Maracaná, como lo hizo contra Australia. "Sabemos su estilo de juego, sus características y normalmente no las suelen cambiar. Si juegan con defensa de cuatro o de cinco, se adaptan a las circunstancias. ¿Si nos tienen tomada la medida? Eso se verá el miércoles", remarcó.
"Chile siempre juega muy parecido sus partidos. Sus planteamientos son muy valientes, de ir a por el rival. No te espera ni especula. Son muy agresivos e intensos. Los conocemos muy bien. Antes del partido ante Holanda teníamos mucho respeto y ahora sabemos que sólo nos vale la victoria", valoró el centrocampista.
