El C.F. Fuenlabrada ha sobrevivido a un partido complicadísimo. No sólo a nivel físico, jugando con uno menos desde el minuto 23 sin que se notara demasiado. Mentalmente, la primera mitad y los parones del VAR también pusieron a prueba la capacidad de concentración de los azulones.
El partido tuvo varios protagonistas, pero dos sobresalieron claramente por encima del resto. El ying y el yang, el bien y el mal. Joan Femenías y Rubén Ávalos Barrera. El guardameta del Fuenla fue la nota más positiva del partido, pues sus tres paradones evitaron tres goles casi cantados de un Mirandés que se estrelló en el muro. Encajó dos goles, pero poco o nada pudo hacer para evitarlos. Si los de Sandoval tuvieron opciones, fue porque Femenías se lo facilitó.
En la parte negativa, Ávalos Barrera estuvo cerca de cargarse el partido varias veces. Expulsó a Pathe Ciss por doble amarilla, siendo la primera muy dudosa y la segunda inexistente, y dejó al Fuenla con uno menos durante más de una hora. Luego, en las acciones dudosas, el VAR no fue valiente y prefirió que el árbitro consultara en el monitor jugadas que eran claras. Y en cuando a tarjetas, tuvo la manga mucho más ancha con el Mirandés que con el Fuenlabrada.
Volviendo a lo estrictamente deportivo, el Mirandés tuvo las ideas mucho más claras y la claridad para ejecutarlas, sobre todo en la primera mitad. Recuperaba buenos balones en el centro del campo, aprovechaba la movilidad de Marcos André para encontrar llegadas al área y ponía a prueba los reflejos de Femenías. El Fuenla, inseguro en el pase y superado por momentos, pudo reponerse tanto a la expulsión de Ciss como a la marcha de Sekou, recaído de su lesión.
No estaba 100% en el partido, pero tampoco estuvo fuera en ningún momento. Aguantaba defendiendo, por tramos conseguía manejar la pelota y acercarse al área y terminó el partido ya igualado a su rival, sin evidencia alguna de estar jugando con uno menos.
Todos los goles llegaron en la segunda mitad, empezando por el golazo de falta de Merquelanz. Luego, un penalti a Glauder propició el empate de Hugo Fraile. Duró poco, seis minutos, lo que tardó el Fuenla en hacer un doble penalti en su área (claro el primero, dudoso el segundo) que transformó Matheus.
Con el 1-2 todavía había esperanzas para los azulones, y más tras los cambios ofensivos de Sandoval. Acumularon saques de esquina y en el último, en el minuto 92, le cayó un balón suelto a Anderson en la frontal que el extremo no dudó en empalar para ponerlo en el palo largo, lejos del alcance de Lizoain. Un gol, revisado por el VAR, que supuso la salvación de un Fuenla que lo pasó realmente mal ante el Mirandés y ante Ávalos Barrera.
ONCE DEL C.F. FUENLABRADA: Femenías; Iribas, Chico, Juanma, Glauder (Anderson); Ciss, Randy (Oriol Riera), José Rodríguez; José Fran (Anderson), Sekou (Jeisson), Hugo Fraile (Cristóbal)
ONCE DEL C.D. MIRANDÉS: Lizoain; Álex González, Sergio, Modibo, Kijera (Carlos Julio); Malsa, Antonio Sánchez, Joaquín Muñoz (Alvaro Rey), Merquelanz; Matheus, Marcos André (Álvaro Peña)
GOLES: 0-1 Merquelanz, min.62; 1-1 Hugo Fraile p., min.70; 1-2 Matheus p., min.76; 2-2 Anderson, min.92
