El 2020 se nos escapa de las manos (más bien lo tiramos), y el Fuenla afronta sus últimas fechas de este año. Lo cerrará ante el Mallorca en Son Moix la semana que viene, pero este sábado pone punto y final a esta etapa en casa. El Fernando Torres cerrará hasta 2021 tras este partido ante el Mirandés. Dos equipos a los que no les ha sentado bien el srpint de partidos.
Y los azulones quieren darle al Torres un buen final de 2020. Un año en el que el Fuenlabrada ha dado a su afición seis victorias, nueve empates y sólo cuatro derrotas. Veintisiete puntos de cincuenta y siete posibles, casi la mitad. Un empujón más, la victoria ante el Mirandés, les dejaría con un año en el que habrían conseguido la mitad de los puntos en casa.
Para conseguirla, deberán ser un mejor equipo que el mostrado en los dos últimos encuentros. Más solidez, mejor actuación conjunta y volver a superar en intensidad al rival son los ingredientes para volver al buen camino. A partir de ahí, queda marcar un gol más que el rival e intentar dejar la portería a cero (en ese orden). Suena fácil, pero nunca lo es recuperar las buenas sensaciones. Sandoval sigue sin poder contar con Sekou (hasta mediados de febrero, como poco), y Dragan Rosic sigue teniendo molestias.
En el Mirandés tampoco están en su mejor momento, aunque les basta para superar por un punto al Fuenlabrada en la clasificación. Los de José Antonio López llevan tres partidos sin ganar, ante Castellón, Girona y Lugo. Lejos de Anduva, han sumado casi la mitad de los puntos posibles. Este sábado no contarán con Vivian y Berrocal, por lo que tedrán que buscar otras opciones para su defensa. Llegan también con la noticia de que llegará en enero Cristo González, ex del Huesca cedido por el Udinese.
