La investigación se inició en la comisaría de distrito de Usera-Villaverde cuando los agentes tuvieron constancia de que tres varones estaban comercializando productos falsificados. Las pesquisas policiales derivaron en el descubrimiento de un establecimiento comercial desde el cual se estaba produciendo la distribución y venta de los productos de manera ilícita en la localidad madrileña de Fuenlabrada y una nave en la misma localidad cuya finalidad era almacenar los productos.
Continuando con la investigación los agentes averiguaron que los autores estaban empleando la constitución de una empresa con apariencia legal para cometer los delitos. Así mismo, ocultaban los productos falsificados de marcas comerciales registradas en cajas cuya imagen mostraba el mismo producto que vendían de manera genérica para eludir la acción policial.
Por todo ello se realizó un dispositivo que culminó con dos entradas y registros en Fuenlabrada donde se incautaron más de 47.000 vapeadores sin etiquetado nacional, más de 6.000 etiquetas fraudulentas, 1.600 envases de sildenafilo y 6.200 productos falsificados como camisetas de equipos deportivos, material informático, llaveros o relojes. También se incautó dinero en efectivo y agendas con anotaciones de las compras y ventas realizadas. Los tres varones investigados fueron arrestados como presuntos autores de delitos contra la propiedad industrial y la salud pública siendo puestos a disposición de la autoridad judicial.
