La presunta autora, mediante el empleo de una tarjeta que había contratado a nombre de la perjudicada, realizó múltiples reintegros en cajeros automáticos desde finales del 2020 hasta comienzos del presente año.
Las investigaciones policiales se centraron en la referida directora, quien había cambiado la actitud hacia la víctima en los últimos meses, puesto que había sido durante mucho tiempo su asesora y tramitadora de diversas operaciones financieras con un trato muy cercano y cotidiano.
Además, la investigada, respondía con evasivas a los requerimientos familiares para que les informaran de lo que estaba sucediendo con los fondos monetarios de la afectada.
La presunta autora de los hechos se aprovechó de la situación de la víctima, una mujer de edad con problemas de salud, circunstancia que utilizó para formalizar un contrato de expedición de una tarjeta de débito a nombre de la clienta, de la cual se apoderó y con la que realizó distintas operaciones de extracción de dinero.
Tras conseguir toda la información necesaria, los agentes realizaron las comprobaciones para ubicar físicamente a la directora del banco en los lugares donde se realizaron los reintegros, procediendo posteriormente a su detención y puesta a disposición de la autoridad judicial como presunta autora de un delito de estafa.