Iñigo Onieva deja el negocio de la noche para rehabilitar 'El Café Gijón' en Madrid

Iñigo Onieva se lanza a la aventura de ser hostelero rehabilitando un conocido bar de Madrid

A finales de mayo trascendía la noticia: a dos meses de su boda con Tamara Falcó, Íñigo Onieva se quedaba compuesto y sin trabajo.

Después de dos años como relaciones públicas del grupo Mabel Hospitality -propietario entre otros de los restaurantes 'Tatel' y 'Totó' en Madrid- y tras no llegar a un acuerdo económico para aumentar su proyección en la empresa con nuevas funciones, ambas partes habrían roto su contrato, dejando al ingeniero en el paro a las puertas de dar el 'sí quiero' a la marquesa de Griñón.

Su entorno no tardaba entonces en adelantar que Íñigo no estaba de brazos cruzados, ya que entre sus planes estaría un proyecto personal de restauración muy especial que vería la luz a principios de 2024 y en el que ya estaría trabajando.

¡Y ahora por fin sabemos cuál es!. Según ha revelado la periodista Beatriz Cortázar en EsRadio, el 'yerno' de Isabel Preysler será el rostro visible de uno de los locales más emblemáticos de Madrid, El Café Gijón, ubicado en pleno Paseo de Recoletos, muy cerca del piso de Tamara e Íñigo.

Un grupo de inversión ha rescatado el negocio de la quiebra y ha contratado al ingeniero como «socio no mayoritario» para que se encargue «a principios de 2024» de «volver a ponerlo de moda», dándole un aire más fresco y actual.