Ezra Miller ha pasado estos dos últimos años enfrentándose a problema tras problema. El actor, autoproclamado de género no binario, está ahora mismo bajo tratamiento psicológico por los diversos problemas mentales que sufre, así como las varias causas legales que tiene abiertas por diferentes motivos.
La espiral de problemas de Miller podría haber comenzado en 2019, tras conocer el divorcio de sus padres. "Ezra no había perdido el control en público así hasta que ocurrió esto", decía un amigo de Miller. "Primero el incidente en Islandia, y a partir de ahí, fue pasando todo lo que sabemos".
En 2020, el vídeo donde se ve al actor ahorcando a una mujer con sus manos en un bar de Islandia voló como la pólvora por internet, comenzando así su montaña de problemas personales y con la justicia. Al mismo tiempo, se conoció que Miller estaba siendo aconsejado por un guía espiritual, llamado Jasper Young Bear, que creía que Miller era "el próximo Mesías y que estaban enviando demonios" para matar al actor.
Fuentes aseguran que el actor a veces se refería a sí mismo como "Jesús o el diablo" de manera alternada.
Miller aparecerá el año que viene, a pesar de las quejas y las diversas controversias, en la película 'The Flash', la nueva saga de la franquicia de DC Comics, un papel que Miller asegura es "quien unirá a todo el mundo en el multiverso de DC Comics, como hizo Jesucristo". Según se ha conocido, el actor habría estado propagando ese mensaje entre sus seguidores.
"Miller hablaría del metaverso y de la medicina, y de cómo se entiende que es el Mesías y que su trabajo es estar allí. La mejor manera de alcanzar ese nivel espiritual era a través de la práctica, o mejor dicho, yéndose de fiesta. En Islandia era un no parar, sus favoritas eran las fiestas 'rave', podía estar hasta tres días seguidos de fiesta sin parar", contaba una fuente.
Tokata Ojos de Hierro, una activista indígena de 18 años, aseguraba tener un papel principal en las enseñanzas de Miller en su intento de "provocar el apocalipsis". Los padres de la adolescente acusaron a Miller de abuso físico y verbal, así como de seducir a la niña, lo que acabó en forma de una orden de alejamiento del actor sobre la pequeña.
Según Águila Saltarina, la madre de Tokata Ojos de Hierro, Miller no tiene ningún tipo de ancestro nativo-americano, pero se considera a sí mismo "un tipo de mesías, que va a liderar la revolución indígena".
Según lo que se ha podido conocer, también se acusa a Miller de tener una granja donde acudían muchas de sus seguidoras mujeres, donde las acogía bajo unas circunstancias peligrosas y bastante extrañas. En la propiedad habría un altar adornado con "balas, marihuana y figuritas de Flash".
"Muchas veces se les obligaba a las mujeres que llegaban a dejar sus teléfonos móviles en el altar, además de otros ofrecimientos", aseguraba un amigo del actor, que describía esa dinámica como "una dictadura patriarcal". Miller es acusado de controlar un "harem" de, en su mayoría, chicas jovenes, a las cuales "las enfrentaba entre ellas, las hacía luchar y las despreciaba unas delante de otras".
Si bien casi todos los problemas legales del actor han sido resueltos, todavía le queda un caso abierto al actor de un robo con allanamiento de morada en Vermont, al cual se tiene que presentar el mes que viene. Según el actor, este ha sido un "periodo de crisis intensa". "Quiero pedir perdón a todo el mundo a quien he preocupado y alarmado con mi comportamiento".
