El virus del perezoso llega a Europa con 19 contagios y 2 muertes a la espalda

Es fácil confundir el virus del perezoso con el dengue
photo_camera Es fácil confundir el virus del perezoso con el dengue

Una nueva emergencia sanitaria está preocupando a las autoridades en Estados Unidos. Se trata del virus del Oropouche, más conocido como fiebre de la pereza, una enfermedad que también se está empezando a detectar en España, que se transmite a través de la picadura de un mosquito y que ya ha afectado a varias personas en Florida y Nueva York durante este agosto.

La Agencia Nacional de Salud y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EEUU han asegurado que el brote se ha producido entre un grupo de turistas que regresaban de Cuba, una de las regiones con más transmisión de esta enfermedad. Tres de ellos han tenido que ser hospitalizados.

La doctora Marta Arsuaga ha explicado en 'El Confidencial' que este virus se transmite con la picadura de los mosquitos 'Culicoides paraensis' y 'Culex quinquefasciatus'. Fue descubierto en 1955 en Trinidad y Tobago y ya ha causado varios brotes a lo largo de la historia en países como Perú, Panamá y Brasil. De hecho, ha sido en este último país donde se ha confirmado la muerte de dos mujeres jóvenes a causa de este virus, los dos únicos fallecimientos hasta finales de agosto.

El apodo de fiebre de la pereza tiene su origen en el ciclo de transmisión de esta enfermedad en las áreas boscosas de América del Sur, donde el virus se transmite entre insectos y huéspedes vertebrados no humanos, como aves, roedores y perezosos.

Los mosquitos transmisores se reproducen y se crían en aguas estancadas y en lugares húmedos, como charcos o recipientes que se llenan de agua y quedan al aire libre.

Aquellas personas que puedan estar pasando por esta enfermedad no tienen por qué sentir unos síntomas específicos, aunque sí es posible que sufran episodios de fiebre, cefalea intensa, dolores musculares y articulares, cansancio y malestar general. Asimismo, también puede provocar náuseas, vómitos y erupciones en la piel.

Los síntomas suelen prolongarse en torno a los siete días y los expertos advierten de que son muy parecidos a los de otras infecciones como el Dengue o el Zika, por lo que no deben ser confundidos.

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