La agresión sexual se produjo, presuntamente. el pasado 10 de septiembre sobre las cuatro de la madrugada, cuando la chica fue abordada por un hombre en los lavabos de la última planta del local. Se investiga si la agresión se produjo mediante sumisión química y la Policía ha pedido las grabaciones de esa noche a los responsables de la sala.
Sobre este caso hay algunas lagunas. La joven relató que tras la agresión se fue en coche con el presunto violador al que pidió que la llevase a su casa y que también el agresor le entregó su DNI. También indicó que tenía "flashes" y recuerdos vagos de lo ocurrido y que sí rememoraba que había sido penetrada vaginalmente. El test rápido en tóxicos a la víctima dio negativo en cocaína, anfetaminas, metanfetaminas, cannabis y opiáceos. Tampoco se aprecieron lesiones genitales. Sí se vieron, en cambio, "escoraciones en la cara anterior de ambas rodillas".
La acusación particular del caso ha solicitado la búsqueda y captura para el agresor, que se encuentra por el momento en paradero desconocido. La joven dijo que el presunto agresor le entregó voluntariamente su tarjeta de identidad en el que consta que es un ciudadano argentino.
Sobre las 04.00 de la madrugada, decidió subir a la última planta porque en la que se encontraba no había baño. A partir de ahí, solo recuerda que un hombre la abordó dentro de uno de los baños y la violó. Su siguiente recuerdo es encontrarse en el parking y que dos hombres la introdujeron en un vehículo, siendo llevada a su domicilio. La mujer indicó en siu primera declaración que pidió a ese hombre que la trasladara a su casa. Tras lo sucedido, acudió al Servicio de Urgencias del Hospital de la Paz y denunció los hechos sobre las cinco de la tarde de ese mismo día.
Fuente: El Mundo