Los tratamientos capilares han experimentado una gran evolución en los últimos años. Gracias a los múltiples procedimientos existentes, no hay ningún problema de este tipo que no cuente con una solución. Actualmente, existen técnicas tan eficaces y versátiles como la tricopigmentación o la micropigmentación capilar, que de hecho se encuentran entre las más demandadas.
Evidentemente, y como siempre pasa con todo, esto tiene sus ventajas y desventajas, aunque las primeras superan ampliamente a las segundas. Vamos a ver cuáles son las principales.
¿Qué es exactamente la micropigmentación capilar?
La micropigmentación capilar es una intervención estética semipermanente. Con ella, se cubren las áreas que carecen de folículos pilosos. Esto se hace a través de la inyección de pigmentos en la piel, generalmente en el pecho, los labios, el cuero cabelludo o los labios. Dentro de esta intervención hay tres clases de técnicas; el aplicar una u otra depende del resultado que se desee lograr:
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Corrección de cicatrices: los micropigmentos son inyectados directamente en un tejido cicatricial con el objetivo de disimularlo o camuflarlo. Sea cual sea el caso, los resultados son siempre hiperrealistas. Es imposible distinguirlos de lo natural.
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Efecto rapado: se implanta un tinte punto a punto en la capa superficial de las regiones calvas de la cabeza. Lo que se busca es lograr un look rapado.
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Efecto redensificador: una técnica muy similar a la del efecto rapado. La principal diferencia radica en que el pigmento es introducido en las regiones poco pobladas en lugar de en las calvas. De este modo, se oscurece el cuero cabelludo haciendo que este parezca más denso.
Pros y contras de la micropigmentación capilar
Vamos ya con los pros y contras de esta magnífica técnica. Evidentemente, es preciso que sea realizada por expertos cuya profesionalidad esté fuera de toda duda para que estas ventajas sean tales.
Y es que cuando nos ponemos en manos de alguien que no es realmente experto y profesional es común que surjan problemas como manchas, cicatrices o una apariencia falsa y artificial.
Pros
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Es una técnica segura y prácticamente indolora. Además, existe la posibilidad de aplicar anestesia local.
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En el caso de las cejas, permite que estas se dibujen de una forma muy precisa.
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Los resultados no tardan en notarse.
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El efecto visual que se consigue es realmente atractivo y natural.
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También sirve como complemento para tratamientos antialopécicos (por ejemplo, el implante capilar) para mejorar la apariencia final.
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Se utilizan tintes de la más alta calidad. Estos no dejan residuos dérmicos y tampoco se borran con las actividades acuáticas, el sudor o el rascado.
Contras
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En el caso de que optes por una técnica como el efecto rapado, tu look será siempre el mismo.
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No es una solución totalmente definitiva, ya que cada cierto tiempo (por lo general, de uno a tres años, dependiendo de factores como el tipo de piel) será necesario aplicar algunos retoques (aunque esto resultará más económico que el tratamiento inicial). No obstante, hasta esto tiene sus ventajas, puesto que hace que el diseño resulte más flexible.
No hay duda de que estamos ante una técnica que puede proporcionarnos grandes beneficios a cambio de muy pocas desventajas.
Eso sí, para lograr unos óptimos resultados siempre es preciso recurrir a los servicios de un buen y experimentado profesional que cuente con buenas referencias, como es el caso del Dr. Antonio Fernández Brito de la clínica Microcapilar Hair Clinic, que incluso fue galardonado con el premio al mejor médico del año hace dos años.
