La reducción que se obtiene es muy escasa, lo que hace que el efecto sea practicamente inapreciable
La OCU ha realizado un estudio sobre la eficacia de un producto cosmético, Somatoline reductor intensivo 10 noches, que promete reducción de la grasa localizada en 10 días.En un laboratorio experto en cosméticos, durante 14 días, 60 mujeres voluntarias han usado Somatoline o un placebo, sin saber de qué producto se trababa y se han sometido a diferentes pruebas y medidas. Tanto al inicio como al final del tratamiento se midieron las circunferencias corporales de tres áreas: cadera, cintura y muslos. También se midió, mediante una ecografía, la capa grasa de debajo de la piel de estas tres zonas. Por último se preguntó a las voluntarias del test, a través de un cuestionario, su opinión sobre el producto que habían usado y sobre los efectos percibidos.
Apenas funciona
Los resultados muestran que Somatoline apenas funciona. La reducción que se obtiene con el producto es escasa, de solo unos milímetros. Muy poco si se compara con la medida total del contorno, lo que hace que el efecto sea prácticamente inapreciable, 0,6 cm sobre un contorno medio de 59 cm en los muslos, 0,8 cm sobre un contorno medio de 82 cm de cintura y 0.9 cm sobre un contorno medio de 101 cm en la cadera la cadera. La reducción de la grasa subcutánea es todavía menor y apenas supera 1 mm.Estos resultados contrastan con la publicidad intensiva que realiza este producto y que transmite la idea que, de una forma rápida y sin apenas esfuerzo, se puede adelgazar y reducir la figura. El canal de venta exclusiva en farmacia y parafarmacia, un elevado precio (entre 48,43 €/envase de media en farmacias o 46,55 €/envase de media en parafarmacias) e incluso el color verde quirófano de la caja o el aroma medicinal contribuyen a dar una apariencia de calidad que contrasta con los pobres resultados obtenidos.
Una vez más nos encontramos ante un producto con resultados escasos que se adornan y exageran por la publicidad, sin que la legislación lo impida. La Organización de Consumidores pide que la normativa sobre alegaciones cosméticas sea más restrictiva, de forma que solo se pudieran publicitar los efectos que de verdad sean relevantes para los consumidores, no dar pié a la confusión entre los mismos.Para reducir y perder grasa la base sigue siendo la dieta y el ejercicio y no los cosméticos. De ellos podemos esperar como mucho ligeros resultados de afinado de la silueta, y de duración temporal. Por ello el reclamo de perder grasa con un cosmético no parece ni apropiado ni justo y puede confundir al consumidor. OCU va a dar traslado de estos resultados a la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid para que determine si es engañosa la publicidad de este producto.
Fuente: OCU