El sistema llamado 'Safe Up' es un aparato incorporado al camión, al que los trabajadores se fijan con un anclaje.
El trabajador tiene que ponerse un equipo anticaída que consta de un arnés con un mosquetón a la altura del pecho y que va colocado en su cuerpo como si fuera un mono, con sujeción entre las piernas y en los brazos. Del mosquetón sale un cordón metálico terminado en una bola. Para que el trabajador se amarre al sistema debe introducir esa bola en una ranura que tiene el módulo 'Safe Up' ubicado en el lateral del camión.
Una vez anclado, el sistema eleva y pretensiona al operador, de esta manera si se produjera un golpe u otra emergencia evitaría su caída o que tocara el suelo, ya que quedaría suspendido en el aire. Hay tres longitudes de ese amarre para adaptarse a las diferentes alturas de los trabajadores.
Asimismo, en la cabina del conductor hay instalado un cuadro de información, que en el caso de que exista alguna anomalía, lanza un aviso mediante una luz roja y emite una señal acústica, lo que permite que el conductor pare el vehículo y asista a su compañero. Si todo está normal y el mecanismo está activado, se enciende una luz verde.
Cuando deja de utilizarse, el trabajador acciona un botón rojo que hay en el lateral del aparato con el que desengancha la bola, quedando así liberado. Además, este sistema, al estar automatizado, no entorpece en la recogida de los residuos.
El presidente de la empresa municipal, Jesús Santos, afirmó que con el nuevo mecanismo se evita la caída ante imprevistos como un "frenazo en seco". Añadió que también "se trata de una apuesta por la industria nacional pues el sistema está patentado, fabricado y comercializado por una empresa española".
Fuente: Telemadrid