Tuenti M. Estudiantes 86 – 66 Baloncesto Fuenlabrada: Kuric fue demasiado para un Fuenlabrada que echó de menos a sus estrellas

El escolta norteamericano anotó seis triples para liderar a su equipo, que pasó por encima a un Fuenlabrada irreconocible. Feldeine sumó 13 puntos, la mayoría en el último cuarto, cuando ya no había nada en juego. Panko se quedó en 7, pasando totalmente desapercibido. El Fuenlabrada pierde una gran oportunidad de alejarse del descenso y de complicar la vida a un rival directo.

Un derbi no es un partido cualquiera. El cosquilleo en el estómago, las frecuentes miradas al reloj para ver las horas que quedan para que empiece el encuentro, las ganas de ganar más que ningún otro choque… Puede que un Estudiantes – Fuenlabrada no llegue a esos extremos, probablemente porque faltan cuentas pendientes. La victoria en el último segundo del partido X, el tiro que nos impidió ganar el título en el año H, los duelos históricos entre sus escoltas… Un Estudiantes- Fuenlabrada no tiene esos alicientes pero, a día de hoy, no dejan de ser dos equipos que luchan por no descender, motivo suficiente para  tener ganas de que llegara un partido así. Y de que terminara, hablando desde la visión de los aficionados fuenlabreños. Porque este derbi light ha sido más light que nunca y por no tener no ha tenido ni emoción en los minutos finales, donde el Estudiantes ha abusado de su vecino del sur.  Era de esperar más igualdad, y también un buen partido de Andy Panko. Pero ni una ni otra cosa ocurrieron, para sorpresa de todos.

El norteamericano apenas sumó siete puntos en un encuentro que no iba encaminado a grandes puntuaciones. Dos minutos y nadie había anotado. Hasta que llegaron el croata Banic y el serbio Paunic y la histórica rivalidad de sus países la llevaron a la cancha, al menos hasta que Cabezas rompió el duopolio (8-6). Para entonces el encuentro ya había entrado en la dinámica de los tiros libres. Posesión del Estudiantes, tiros libres. Posesión del Fuenlabrada, tiros libres. Y así varias veces.  Eso está muy cuando sobre la cancha están Dwight Howard, Ben Wallace y Shaquille O´Neal, porque es gracioso verles sufrir desde el 4,60, pero en circunstancias normales el ritmo de juego se ralentiza, y eso no es nada gracioso.

Entre tiro libre y tiro libre asomaba Kuric con dos triples y ocho puntos durante el primer cuarto. Feldeine debía hacerle sombra pero una vez más el dominicano volvió a echar de menos el Fernando Martín, y eso que lo tenía a unos minutos en coche. En el último parcial mejoró sus números pero volvió a demostrar que el Feldeine de fuera de casa es mucho peor que el Feldeine local. Un 2+1 de Diagné, de lo poco potable en la primera mitad, ponía el 24-14 con el que acabó el primer cuarto.

Por cada jugador del Fuenlabrada que tenía el balón había dos del Estu que le estaban presionando, y los otros tres bien colocados para que el jugador en cuestión no pudiera doblar el balón. Ese ritmo defensivo iba a ser complicado de aguantar. O a eso se agarraba Casimiro para voltear la situación. Pero a falta de eso, el Fuenlabrada se encomendó a Arnold, un héroe inesperado que aguanta los golpes en la zona como muy pocos. La versión negra y modesta de Felipe Reyes anotaba siete puntos seguidos para su equipo, lo que unido a un mate de Vargas ponía al Fuenla solo cinco abajo (30-25). Las canastas llegaban con cuentagotas hasta que Dani Pérez anotó dos puntos y animó el cotarro, pero el Estu también aumentó su ritmo anotador y la ventaja apenas bajó al descanso con respecto al primer cuarto (40-31).

Primera jugada del tercer cuarto y Panko suma su tercera falta. Mala señal pensaron algunos. Los mismos que se olvidaron de dicha falta cuando los de Casimiro encadenaron un parcial de 0-9 que culminó un triple de Feldeine (su primera canasta del derbi). De triples iría la cosa hasta el final del parcial.  Colom, Kuric, Dani Pérez, Colom, de nuevo Kuric… Todos sumaban de tres en tres y solo uno lo hacía para el Fuenlabrada. Conclusión, un cuarto por jugar y al Fuenlabrada le tocaba remontar siete puntos (58-51).

Panko se puso a ello con cuatro puntos seguidos, pero ahí se quedó. Demasiado controlado por la defensa estudiantil como para hacer en un cuarto lo que no había hecho en tres. Miso anotó uno de esos triples que duelen al rival, cuando se disponía a remontar. Ahí se acabó el Fuenla, aunque los de Casimiro se negaban a reconocerlo. Kuric les dio dos motivos de sobra en forma de triple y la ventaja se disparó hasta los 15 puntos (72-57). El americano dejó claro que porqué es miembro honorífico del club de “Los aniquiladores del perímetro con cara angelical”, cuyo presidente es Jaycee Carroll.

Feldeine se dedicó a mejorar sus estadísticas anotadoras y Txus Vidorreta a dar su minuto de gloria a Juancho Hernángomez, que cerró el marcador con un triple, poniendo fin a un encuentro donde el Fuenlabrada perdió cinco partidos en uno. Perdió el derbi, la oportunidad de complicarle la vida a un rival directo, el basketaverage, ponerse con tres victorias de ventaja sobre la zona de descenso y la confianza conseguida tras las dos últimas victorias. Quizá todo ello sea un buen aliciente para el derbi de la próxima temporada. Si es que ambos mantienen la categoría.

86 - Tuenti Móvil Estudiantes (24+16+18+28): Miso (7), Van Lacke (5), Rabaseda (1), Banic (18) y Slokar (5) -quinteto inicial- Rubio (4), Jaime Fernández (0), Nogueira (10), Colom (9), Kuric (24), J. Hernangómez (3) y Guerra (0).66 - Baloncesto Fuenlabrada (14+17+20+15): Cabezas (5), Feldeine (13), Vargas (7), Panko (7) y Paunic (4) -quinteto inicial- Diagne (7), Dani Pérez (11), Montáñez (0), Vega (0) y Arnold (12).