El Fuenlabrada va a la guerra contra la RFEF

El C.F. Fuenlabrada pasa a la acción, y de qué manera, en su conflicto por la crisis del coronavirus que arrancó hace tres semanas. Tras la publicación de que la intención del Juez Instructor de la RFEF, Ricardo Esteban Díaz Sánchez, va a solicitar el descenso administrativo del Fuenla a Segunda B, el club ha sacado un comunicado en el que va con la artillería pesada por delante: la RFEF habría cometiendo numerosas irregularidades para llevarse al Fuenlabrada por delante. Tienen pruebas y las han puesto en conocimiento de los Juzgados de Instrucción Penal y del CSD. 

El principal foco de conflicto es el propio Juez Instructor de La RFEF. Según el C.F. Fuenlabrada, su nombramiento ya constituye una irregularidad porque se habría hecho única y exclusivamente para este caso y no a principio de temporada (como exige la norma), y porque no tiene experiencia en derecho deportivo. 

Siguiendo con Ricardo Esteban Díaz Sánchez, la acusación más grave del Fuenla viene ahora, porque argumentan (y dicen poder probar mediante un perito independiente) que el Juez Instructor no dicta sus propias providencias, sino que lo hace el Vicesecretario General de la RFEF, Miguel García Caba. Además, Díaz Sánchez habría cometido numerosas irregularidades en la instrucción del caso como tomar declaraciones sin asistencia de un letrado, obviar pruebas o saltarse plazos. La ofensiva contra la RFEF es contundente, grave y con pruebas. Cómo sean de contundentes lo tendrán que decidir tanto los juzgados como el CSD. 

Fuera de las acusaciones, el Fuenlabrada dice sentirse tranquilo, argumentando que sería una locura decretar el descenso como sanción después de que el Comité de Competición no lo viera ni castigable con la pérdida del partido ante el Dépor. Se reiteran en que actuaron en todo momento siguiendo las órdenes de La Liga, y aseguran que irán hasta el final para defenderse y llevar ante la justicia a estas "autoridades públicas que abusan de su poder de forma ilícita".