06/04/2015 | Víctor Yeray Huéscar | Fn
El Ejército de Kenia ha bombardeado dos bases de la milicia terrorista Al Shabab en el sur de Somalia como respuesta al ataque en Garissa el pasado jueves que dejó 148 fallecidos, según han informado fuentes militares al diario keniano “The Standard”.
La respuesta del gobierno keniano no se ha hecho esperar tras el atentado perpetrado por Al Shabab en la región fronteriza de Garissa. Las bases de la banda terrorista en Gondodowe e Ismail han sido los objetivos. Ambas bases se encuentran en la región fronteriza de Gedo, al sur de Somalia.
Según estas fuentes militares han asegurado, se han centrado en esos dos asentamientos porque, según las informaciones de las que disponían, “los milicianos vienen de allí para atacar Kenia”. Y es que la frontera entre Kenia y Somalia, de más de 700 kilómetros, es una barrera fácil de superar y difícilmente controlable por las autoridades kenianas, que ven como estos terroristas cruzan las fronteras continuamente para llevar a cabo atentados contra áreas fronterizas como Garissa.
Se trata del primer ataque del KDF (las Fuerzas de Defensa de Kenia) como respuesta tras el atentado en la universidad de Garissa de la organización terrorista islamista. Las fuentes militares no han precisado si se han producido fallecidos. El ministro de Interior keniano además ha ofrecido una recompensa de 215.000 dólares (unos 196.000 euros al cambio) por el supuesto instigador del atentado en Garissa del jueves, Mohamed Mohamud.
Desde que el Ejército keniano se introdujera en el país vecino para combatir las fuerzas terroristas de Al Shabab, éstos no han parado de cometer atentados contra zonas fronterizas en Kenia. Y es que como un comunicado de Al Shabab aseguraba el pasado sábado, los terroristas consideran que desde entonces el gobierno keniano les declaró la guerra. Desde abril de 2013, la milicia ha acabado con la vida de más de 400 personas en Kenia.