El Ayuntamiento debe intervenir para solucionar el aseo de las conductoras de la EMT

Editorial.-

Hemos conocido recientemente la sanción impuesta por la EMT de Fuenlabrada a una conductora que abandonó el vehículo para ir a orinar a las cocheras de la compañía.

La conductora ha sido sancionada con cuatro días de empleo y sueldo y aunque seguramente la sanción se ajusta al reglamento disciplinario de la empresa por falta grave, hay que entrar en el fondo de la cuestión y en los motivos y causas que han llevado a esta empleada a tomar esa decisión, saltándose la orden del inspector.

Este incidente debe hacer reflexionar a los responsables de la EMT y al gobierno municipal, responsable político de esta empresa pública.

El partido popular ha denunciado que las conductoras de los autobuses municipales tienen que utilizar cuñas para orinar, al no disponer de aseos en ningún lugar del recorrido. También vienen proponiendo hace tiempo la instalación de aseos en las cabeceras, precisamente para evitar lo sucedido con esta conductora y facilitar un aseo digno a todos los conductores/as.

La respuesta que ha tenido el Ayuntamiento nos deja aún más perplejos, indicando que el asunto se está negociando entre sindicatos y trabajadores, acordando con los bares más cercanos la posibilidad de que las conductoras utilicen sus WC para el aseo personal.

Es dificil de creer que Fuenlabrada, una ciudad que hace gala de sus políticas sociales y de igualdad, precisamente ahora que estamos celebrando el Día Internacional de la Mujer, considera que la mejor solución para el aseo de las conductoras es acudir a los baños de los bares.

Estas empleadas que pasan muchas horas sentadas al volante de un autobús, tienen el derecho y la empresa la obligación de dotarles de vestuarios y baños dignos para resolver sus necesidades fisiológicas. Imaginemos por un momento a una conductora que se encuentre en su periodo menstrual y que tenga que acudir al baño de un bar para su aseo.

¿Que pasaría si se les dijera a todos los empleados/as municipales que fueran obligatoriamente a los bares para su aseo personal? Me temo que no lo entendería nadie y las protestas estarían garantizadas.

No es admisible la situación en la que se encuentran los/as conductores/as de la EMT y menos la solución que propone la empresa con el visto bueno de los sindicatos, por ello deben intervenir los responsables políticos del gobierno municipal y obligar a esta empresa pública a instalar aseos en las cabeceras de línea, como ocurre en la EMT de Madrid, ya que la solución propuesta es indigna e inadmisible.

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