La investigación se originó a principios de 2023 al detectarse un incremento de denuncias por robos consumados o en grado de tentativa en diferentes naves industriales de la localidad. Agentes del área de investigación de Arganda del Rey descubrieron entonces que los robos seguían un mismo método: siempre de noche, escalaban hasta el tejado de la nave y fracturaban una ventana o realizaban un butrón para acceder a su interior. Entonces cargaban sus furgonetas con tantas herramientas y aluminio como encontrasen y las revendían en chatarrerías. En el caso de que saltara la alarma o que fuesen sorprendidos abandonaban el lugar de forma precipitada, siempre usando unos vehículos que en las bases de tráfico estaban a nombre de sus familiares.
A través de testimonios de testigos y del visionado de las cámaras de seguridad los investigadores llegaron hasta un grupo organizado cuyos integrantes tenían numerosos antecedentes por hechos similares y que frecuentaban el municipio. Cuatro hombres y dos mujeres de entre 30 y 50 años conformaban la banda, organizada y experimentada en este tipo de hechos delictivos, pues entre todos ellos suman una decena de detenciones previas por delitos contra el patrimonio.
La bautizada como operación Síbilus se saldó con la detención de los seis integrantes de la banda, a quienes se les imputan 14 delitos de robo con fuerza..
