Los hechos ocurrieron sobre las ocho de la tarde del pasado día 16 de junio cuando la Policía Municipal recibe una llamada de que se está produciendo una agresión de un hombre a su mujer en una vivienda situada cerca de la estación de Metro Sierra de Guadalupe.
Los agentes de Policía Municipal acudieron al lugar, pero nadie contestaba al telefonillo, pero los vecinos les abrieron la puerta. Del domicilio en cuestión salió una mujer, que reconoció que había sido golpeada en la cara por su pareja, algo que ya había sucedido en otras ocasiones, por lo que le quería denunciar.
Al entrar a la casa, los agentes informaron a este hombre, de 34 años, que le iban a detener acusado de un delito de lesiones y otro de violencia de género, por lo que el sujeto se puso muy violento, azuzando a su perro, un American Staffordshire, para que atacara a los policías, que se vieron obligados a activar un táser, que finalmente no usaron.
A continuación el agresor se encerró en su dormitorio con una cuchilla, amenazando con cortarse el cuello si le arrestaban. Tras gritar y realizarse pequeños cortes en el cuello y brazos, el individuo se tranquilizó con las palabras que le lanzaban los agentes por la ventana hasta que finalmente salió de la habitación, momento en el que fue detenido sin resistencia.
