Fernando Fernández Tapias fallecía el pasado 25 de octubre a los 84 años dejando tras de si un patrimonio millonario a repartir.
Consciente de la guerra familiar que se avecinaba, el empresario naviero tomó drásticas decisiones en vida que le llevaron a enfrentarse a sus hijos mayores en los tribunales.
Colocó a su mujer, Nuria González (52 años) como apoderada de varias de sus empresas con el objetivo de sustentar el futuro de sus hijos pequeños. Esto no gustó nada a los mayores, que intentaron, sin éxito, inhabilitar a su progenitor.
Ahora, el testamento ha visto la luz confirmando lo que era un secreto a voces. La periodista María Eugenia Yagüe ha tenido acceso al polémico documento en el que Fernández Tapias deshereda a sus hijos mayores y los acusa de "maltrato psicológico".
Así lo detalla en 'LOC', donde también desvela algunos de los beneficios de los que ya contaría su viuda como la mansión ubicada en la exclusiva urbanización Puerta de Hierro, que ya estaría a su nombre desde hace tiempo.
Aunque lo cierto es que la relación del empresario naviero con sus hijos mayores era nula en los últimos años, esta decisión ha caído como un jarro de agua fría entre Fernando, Borja, Íñigo, Juan Carlos y Sandra que no pensarían quedarse con los brazos cruzados ante la drástica decisión de su progenitor y estarían sopesando con su equipo de abogados impugnar el testamento.
Cabe recordar que las leyes españolas garantizan siempre un derecho inmutable de los hijos al tercio de la herencia correspondiente a la legítima. Una legítima que en este caso recogería millones de euros.
Sea como fuere, lo que es una realidad es que la guerra entre Nuria González y los hijos mayores de Fernando Fernández Tapias solo acaba de empezar y promete dar mucho qué hablar.
